Formar parte del listado de ciudades Patrimonio de la Humanidad es un privilegio, y San Cristóbal de La Laguna tiene el gran honor de ser parte de ello. Las calles y casas que componen la ciudad, son el ejemplo de una planificación urbana innovadora, compuesta por edificios históricos únicos declarados Bienes de Interés Cultural.
Historia
San Cristóbal de la Laguna fue fundada en 1497 por Alfonso Fernández de Lugo. La última ciudad se establece en las Islas Canarias (primer territorio de ultramar de España) y saca su nombre de un lago poco profundo o de una zona pantanosa (La laguna) drenada en 1837.
Los primeros Colonos, la mayoría soldados, no recibieron ninguna parcela definida: La zona urbana no fortificada fue considerada como un espacio público en el que cada uno podía construir.
Fueron construidas pequeñas casas alrededor de la Iglesia de la Concepción, en el mayor desorden, sin plano general, en la ciudad alta (Villa de Arriba). Esta situación fue regularizada en 1502 en un plano basado en los planos que Leonardo Da Vinci había realizado para la ciudad de Imole, y que fue adaptado por el gobernante (Adelantado) para la zona comprendida entre su residencia oficial y la Iglesia. Largas calles principales (Calles Reales) enlazaban espacios públicos abiertos y formaban una cuadrícula sobre la que se insertaban las calles más pequeñas.
La ciudad baja así creada (Villa de Abajo) se extendió rápidamente, atrayendo a las clases dirigentes de la isla y en 1515 ya contaba con más de mil habitantes. Las comunidades monásticas comenzaron a construir en el S. XVI la Iglesia de Nuestra Señora de los Remedios (1511), la Ermita de San Miguel (1506), los hospicios de San Sebastián (1506) y los Dolores (1515).
El Concejo Municipal (Cabildo) hizo llegar el agua a la ciudad con sus recursos en 1521 y los primeros edificios públicos se construyeron en 1525.
La ciudad buscó un estatuto oficial desde 1514 y solo se le acordó en 1531. En 1554 el Concejo Municipal ordenó destruir toda edificación en caña, con tal de disminuir los riesgos de incendio, precaución importante, ya que en estas fechas, la ciudad contaba con seis mil habitantes, haciendo de ella la ciudad más grande de Canarias.
San Cristóbal conservó esta posición política, religiosa y comercial dominante durante los siglos XVII y XVIII. La prosperidad obtenida se refleja en los edificios construidos en esta época.
El centro económico y político fue traspasado en este tiempo a Santa Cruz en el S. XVIII, provocando el declive de San Cristóbal que conservó únicamente un papel religioso y cultural. Una renovación política, fue causa de la instalación en San Cristóbal de la sede de la Corte Suprema (Junta Suprema) de las Islas Canarias en 1808, que terminó bruscamente cinco años más tarde, cuando este cuerpo tuvo desavenencias con el Parlamento Provincial (Diputación Provincial) instalado en Santa Cruz de Tenerife y fue disuelto.
El S. XX ha visto recobrar notablemente a San Cristóbal un poco de su antiguo papel, gracias al papel de su Universidad.
Descripción
San Cristóbal se compone de dos partes distintas: La ciudad Alta (Villa de Arriba) de 1497 y la ciudad Baja (Villa de Abajo) de 1502. La Calle principal (Calle de la Carrera) forma el eje de la ciudad planificada, enlaza la primera iglesia parroquial con la Plaza del Adelantado. Paralela a ésta, la Calle San Agustín forma el centro geométrico de la ciudad, bordeado por grandes casas construidas por los primeros mercaderes de la ciudad.
Plazas se abren a su paso cotejando formas regulares inspiradas en modelos mudéjares.
La primera Iglesia dedicada a la Inmaculada Concepción fue completamente demolida y reconstruida a partir de 1511. Fue reorganizada y agrandada en varias fases durante los años siguientes. La mezcla de estilos y las estructuras asimétricas, torre, baptisterio, capillas etc. que caracterizan su forma actual, reflejan su larga historia. No muy lejos, quedan pocas cosas del Monasterio de San Agustín, fundado a principio del S. XVI (aún posee un bonito claustro de dos niveles).
La construcción de la nueva Iglesia parroquial de la ciudad fue un proceso largo, puesto que el gobernador estaba interesado en el desarrollo de la Ciudad Baja, donde los trabajos empezaron en 1515 con la construcción de la Iglesia Parroquial consagrada a los Remedios, edificio de nave única, de estilo mudéjar, con una torre adosada en el S.XVII, que se convirtió más tarde en la catedral del Nuevo Obispado de Tenerife, establecido en 1813. La fachada original se derrumbó y ha sido reemplazada por una fachada neoclásica. Actualmente la nave central está bordeada por naves laterales y varias capillas laterales.
El convento de Dominicos de Santa Catalina de Siena fue inaugurado en 1611. Adquirió tanta importancia que englobó varios edificios vecinos. Las fachadas de la Iglesia y de otros edificios son simples y austeras, pero los interiores están suntuosamente decorados.
La pequeña Ermita de San Miguel ha declinado rápidamente tras su fundación por el primer gobernador y fue utilizada como almacén hasta 1970, época en la que el consejo de la isla de Tenerife la restauró y la reconvirtió en centro cultural. Los vestigios del Convento de Santa Clara, muy próspero en el S. XVI, fueron destruidos en gran parte por el fuego en 1697, sirviendo igualmente como Centro Cultural.
Existen bellas residencias antiguas en San Cristóbal de La Laguna. La más antigua, la Casa del Corregidor, en la que la fachada de piedra roja tallada es original, data de 1545. Está actualmente ocupada por las oficinas municipales.
Del mismo modo, la casa Lercaro, del S. XVI, con una fachada de estilo manierista remarcable, es en la actualidad el Museo de Historia de Tenerife.
La casa de Alvarado Bracamonte, llamada también Casa de los Gobernadores, fue construida entre 1624 y 1631 y utilizada por los gobernadores sucesivos como residencia y lugar de trabajo hasta el S. XIX. Tiene un portal en piedra roja, en pilastras, un balcón en hierro forjado y un frontón partido. En la actualidad habilita los servicios de Patrimonio Artístico e Histórico de la ciudad.
La casa Salazar del s. XVII está muy bien conservada. Edificada en 1682, tiene un elegante portal de estilo ecléctico, principalmente barroco pero con estilos manieristas y neoclásicos. Pertenece ahora al Obispado de Tenerife. La casa de Osuna, contemporánea a la Casa Salazar, tiene como característica más llamativa el balcón del primer piso de su fachada principal; ahora acoge la enorme colección de archivos de San Cristóbal.
Entre los más bonitos edificios del S.XVII está la elegante Casa de Montañés, primero residencia privada y actualmente sede del Consejo Consultivo del Gobierno Autónomo de Canarias, y la casa en forma de “L” de los Jesuitas, ocupada por la Sociedad de Jesús, hasta su expulsión de Canarias en 1767, fecha en la que fue dada a la Sociedad Real de Amigos del País de Tenerife, quienes ocupan aún las oficinas. La casa de la Alhóndiga fue construida a principios del S. XVIII para servir de mercado de maíz; a principios del S.XIX se utilizó como barracones para los militares franceses y el tribunal del Distrito. Actualmente está ocupada por oficinas municipales; su portal es particularmente interesante.
San Cristóbal posee además, algunos bellos ejemplos de arquitectura del S.XX como el Palacio de Rodríguez de Azero (actualmente Casino) y el Teatro Leal, ambos con un estilo ecléctico.
Observación y recomendaciones del ICOMOS
El Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS), qué visitó la ciudad en 1999, realizó un informe de proposición de inscripción dónde introduce esta “declaración de significado”, justificando la elección de San Cristóbal de La Laguna como Patrimonio Mundial.
- Una ciudad del tiempo de los Reyes Católicos (Los Reyes Católicos), 1500.
- La ciudad de un solo hombre, el gobernador Alfonso Fernández de Lugo.
- Una ciudad colonial representativa de la misión de los colonos de una ciudad-república en tierra nueva.
- Una ciudad administrativa que ilustra una concepción de la ciudad, donde las decisiones de los poderes públicos y del consejo municipal (cabildo) son tenidos en cuenta en el proceso de construcción de la ciudad.
- La primera ciudad de “paz”. Ciudad no fortificada. Primer ejemplo de ciudad-territorio, precedente de las ciudades americanas.
- La ciudad en tanto que proyecto.
- Dos ciudades y dos épocas de formación: la ciudad alta y la ciudad baja.
- Forma derivada de la navegación: una esfera y una disposición de tablero ordenado según ejes.
- Una ciudad completamente controlada por medidas reglamentarias.
- El trazado de calles se hace a imagen de la estructura social: reparto.
- Punto culminante del milenio en el año 1500; la reforma del clérigo se refleja en el tejido urbano.
- Dimensiones en tanto que símbolos: la resurrección y el fin de los tiempos.
- Un eje religioso enlaza las iglesias parroquiales.
- El significado de San Cristóbal y de la Laguna.
- La imagen de la ciudad: la constelación de puntos de una carta de navegación y las constelaciones del cielo.
El informe de la expedición del ICOMOS sugiere leves modificaciones de los límites del bien, propuesto para la inscripción, que fueron aceptadas por las autoridades competentes. Otras sugerencias que fueron igualmente aceptadas conciernen a la creación de un sistema integrado del tratamiento de servicios de infraestructura (p.e: cables eléctricos), la transformación en zonas peatonales de ciertas calles principales (acompañado de zonas de estacionamiento) y la búsqueda de los antiguos pavimentos hoy recubiertos, con el fin de restaurarlos.