La Laguna se convierte un año más en el epicentro de la Navidad con un espectáculo lumínico que enaltece su legado histórico, mientras incorpora innovadores elementos decorativos, modernos y eficientes. Este año, la ciudad celebra su 25 Aniversario como Patrimonio de la Humanidad, y lo hace con una iluminación navideña que combina tradición, modernidad y un encanto único que atrae a miles de familias para disfrutar de un paseo por la ciudad.

“Un diseño que honra nuestras tradiciones y patrimonio”, destacó el edil de Servicios Municipales, Fran Hernández, encargado de la puesta en escena del espectáculo de luces con el que brilla en estas fiestas el municipio. “Con esta propuesta lumínica hemos querido que cada rincón de la ciudad refleje el espíritu navideño sin perder nuestra esencia histórica, demostrando que la tradición y la modernidad pueden convivir en perfecta armonía”, señaló.

El espectáculo de luces del arco situado en la calle Obispo Rey Redondo, con pases diarios a las 18:15 horas, 19:15 horas, 20:15 horas y 21:15 horas, aprovecha el atardecer para alcanzar su máximo esplendor, erigiéndose como uno de los lugares más visitados. Doce kilómetros de guirnaldas iluminan esta infraestructura, que además presenta un diseño renovado con cuatro pórticos y nuevos ornamentos, consolidándose como uno de los elementos más esperados por la ciudadanía para capturar esta instantánea.

Entre los grandes atractivos, el túnel RGB de la Catedral se ha convertido también en un espacio inmersivo que combina luces y colores en un entorno acogedor, que se ha enriquecido con la instalación de figuras de ángeles de diferentes tamaños, entre otros ornamentos.

“Lo cierto es que el paseo por la ciudad se presenta lleno de sorpresas”, expresó el edil, subrayando que la ornamentación no se limita a las principales calles del casco histórico. “Esta Navidad se ha extendido al entorno, en un esfuerzo por visibilizar y beneficiar al mayor número posible de comercios y negocios locales, que viven en estas fechas una de las campañas comerciales más importantes del año”.  El concejal añadió que “queremos que esta decoración navideña sea un motor para dinamizar nuestra economía local.  Sabemos que la ornamentación lumínica trasciende lo visual, generando un impacto significativo en el tejido comercial. Las familias que acuden a disfrutar del espectáculo encuentran una ciudad viva, donde bares, restaurantes y tiendas ofrecen experiencias que complementan la magia de las luces”, dijo.

En su recorrido por la ciudad los visitantes pueden contemplar árboles navideños de diferentes tamaños que invitan a capturar esta fotografía como recuerdo. Entre ellos, un árbol de 12 metros en Doctor Olivera, de 14 metros en La Verdellada y de 15 metros en Santo Domingo, y otro de 20 metros en la plaza del Cristo. Además, la plaza del Adelantado se ha transformado en un lugar de fantasía con casitas iluminadas, bastones, mariposas gigantes y figuras de elfos, creando un rincón entrañable para grandes y pequeños.

Otros puntos para visitar incluyen el diseño lumínico del callejón Deán Palahí, la cúpula de luces en La Milagrosa y una bola de Navidad gigante en la Junta Suprema. Los mensajes de ‘Feliz Navidad’ en las calles más transitadas, arcos de luces y decoraciones lumínicas con diferentes diseños refuerzan el ambiente festivo en el entramado viario.

Un detalle que caracteriza la decoración de este año es la reubicación de algunos elementos lumínicos emblemáticos que ya forman parte de la tradición lagunera, para continuar sorprendiendo al público con nuevas perspectivas en las vías y plazas. En palabras de Fran Hernández, “La Laguna se reafirma como un destino imprescindible para esta temporada. Con su mezcla de historia y el espíritu navideño acogedor que impregna los espacios públicos, la ciudad y el municipio, en su conjunto, invita a disfrutar de esta experiencia que deleita los sentidos y toca el corazón de las familias”. “Sin duda, la magia de la Navidad cobra en La Laguna una dimensión especial”, concluyó.