La Junta de Gobierno Local de La Laguna aprobó ayer transferir 400.000 euros a la Gerencia de Urbanismo para que elabore el primer Plan de Gestión de la Ciudad Histórica. El organismo autónomo sacará a concurso la redacción de este documento mediante cuatro lotes o documentos complementarios que contendrán los planes estratégico y operativo, de movilidad y diseño de espacios libres, de iluminación y de participación y comunicación. Para ello, se requiere la implicación y el consenso con entidades vecinales y especializadas, sectores socioeconómicos, instituciones, etc.
La Unesco establece que las ciudades declaradas Patrimonio Mundial deben contar con un Plan de Gestión para asegurar la conservación y la gestión sostenible de sus valores patrimoniales. Considera que estos documentos son esenciales para mantener la integridad de los valores universales excepcionales de los sitios y para abordar los desafíos contemporáneos, asegurando que el patrimonio se conserve de manera efectiva, al tiempo que se fomenta un desarrollo urbano sostenible y se promueve la participación activa de la ciudadanía y de los agentes locales en su conservación.
Una obligación
La inscripción del conjunto histórico en la lista de Patrimonio Mundial implica la obligatoriedad de elaborar este Plan de Gestión de la Ciudad Histórica para preservar su «valor universal excepcional». Los bienes que han sido declarados con antelación han de adaptarse a este requisito.
El Plan Estratégico y Operativo es «el grueso» del documento. Define las estrategias normativas para la conservación y protección del conjunto histórico, la zona de amortiguamiento y entorno. Responde a la necesidad de contar con un sistema de gestión documentado que garantice la protección eficaz de los bienes para generaciones presentes y futuras.
El Plan de Movilidad y Diseño de Espacios Libres consiste en desarrollar un modelo de tránsito adaptado a las condiciones físicas y patrimoniales del entorno, además de planificar espacios públicos «de calidad» en el conjunto histórico y su entorno más próximo y contemplar infraestructuras, usos del suelo y relaciones espaciales para garantizar la integración del sitio en su territorio.
Alumbrado y vecinos
Respecto al Plan de Iluminación, debe diseñar un sistema que respete el carácter patrimonial y refuerce la seguridad y calidad ambiental del sitio. Ha de considerar las evaluaciones de impacto de las intervenciones para evitar afecciones sobre el patrimonio.
En el marco de la participación y la comunicación, el documento debe plantear estrategias que garanticen la implicación ciudadana ante la obligación de establecer mecanismos participativos e inclusivos «y sistemas de gobernanza colaborativa». Se debe involucrar tanto a la población y la actividad del conjunto histórico como a los de su zona.
Cumplir con la Unesco
Con una vigencia estimada de diez años, el primer Plan de Gestión de la Ciudad Histórica garantizará el cumplimiento de las directrices de la Unesco. Una vez aprobado, comenzará la fase de implantación y monitorización, en la que los equipos redactores acompañarán su desarrollo y asegurarán el seguimiento y la adaptación de las medidas previstas.
Con el objetivo de dotar al plan de flexibilidad y capacidad de ajuste a las necesidades emergentes, se llevarán a cabo experiencias piloto, cuyos resultados servirán para alimentar un proceso de mejora continua. Dichos resultados propiciarán ajustes específicos en el documento inicial.
Este Plan de Gestión complementa el Plan Especial de Protección vigente. Los segundos se centran, de forma preferente, en la conservación y la protección legal, mientras que los planes de gestión tienen un enfoque más amplio que incluye el desarrollo sostenible y la gestión integral.
Garantizar el futuro
Adolfo Cordobés, concejal de Ordenación del Territorio y Patrimonio Cultural, señala que el Plan ha de responder al reto que se ha marcado el municipio de «garantizar que las necesidades, contemporáneas y futuras, de los residentes en la ciudad histórica sean compatibles con la protección y preservación del valor universal excepcional que le ha valido su declaración como Bien Patrimonio Mundial por la Unesco». El edil reivindica el Plan como «una nueva hoja de ruta, fruto del análisis de estos 25 años de experiencia como Ciudad Patrimonio Mundial que será consensuada con toda la ciudadanía».